Podcast (podcast-de-marketing-sin-fronteras): Play in new window | Download
En el episodio 13 de este podcast hablamos de la importancia de definir nuestro nicho de mercado y llegamos a la conclusión de que, dentro de un orden, cuanto más pequeño sea el segmento de población al que dirigimos nuestro servicio o producto más fácil nos resultará de gestionar y de controlar.
Es muy importante que conozcas bien el perfil de tu cliente ideal, aunque he de reconocer, que no siempre resulta fácil, especialmente si nos dejamos llevar por nuestras creencias, nuestros miedos o nuestros prejuicios.
Curiosamente, el miedo a dejarnos clientes en el tintero es, quizás, el mayor enemigo para el crecimiento de nuestro negocio.
No olvides que, tal y como dijimos en el episodio 13 “nuestro nicho es nuestro tesoro”. Te invito a que oigas ese episodio.
Debes tener en cuenta que definir tu cliente ideal, no significa que no vayas a atender a cualquier consumidor que se acerque a tu negocio. Significa que toda tu comunicación, las palabras que utilices y las imágenes estarán destinadas al perfil que has creado.
Un ejemplo que pongo a menudo es el de imaginar que vendemos zapatos de mujer. Nuestra comunicación irá dirigida hacia las mujeres, pero eso no significa que prohibamos la entrada a los hombres.
Dicho esto, vamos a ver qué factores o elementos deberíamos tener en consideración para definir nuestro cliente.
Cuanto más detalle tengamos al definir el perfil de nuestro cliente ideal, mucho mejor, pero ¿qué datos son los que debo tener en consideración para definir dicho perfil?
Pues bien, eso depende de cada negocio o proyecto, en unas ocasiones la edad puede ser un factor decisivo o el género, incluso la raza o las creencias religiosas, pero esto no es siempre así. Por tanto, si aún no sabes cómo es tu cliente ideal, debes coger una hoja en blanco y comenzar a escribir.
Para facilitarte la labor, voy a darte algunas de esas características a definir, para que te sirvan de guía.
En esa hoja en blanco de la que acabo de hablar anota la siguiente pregunta:
¿Cómo es tu cliente?
Ahora responde al siguiente cuestionario:
De cara a mi propuesta de valor, mi producto o servicio ¿Es importante…
- …su edad? (ej: productos para jubilados)
- …su género? (ej: productos de cosmética femenina)
- …su religión? (ej: libros religiosos -biblia, corán…-)
- …su idiosincrasia cultural? (ej: comidas, abalorios)
- …sus creencias? (ej: amuletos, meditaciones, oraciones)
- …su nivel adquisitivo? (ej: productos de lujo)
- …su estado civil? (ej: trajes de novia)
- …tener hijos? (ej: material escolar)
- …su nivel de estudios? (ej: máster universitarios)
- …que trabaje?
- …su ubicación geográfica? (ej: venta localizada)
- …su lengua? (ej: contenidos en español)
Pregúntate también
Con relación a mi producto o servicio…
- ¿Qué necesidades tiene?
- ¿Qué problemas tiene?
Obviamente, solo deberás tener en consideración, de estos datos, los que realmente sean relevantes para tu negocio. Pero cuántos más datos -o características- definamos de nuestro cliente ideal mucho mejor. Más fácil nos resultará definir nuestra campaña de comunicación.