El Black Friday
El Black Friday o Viernes Negro, es el día en que, en Estados Unidos, dan el pistoletazo de salida a la campaña navideña. Su celebración coincide con el día después al de Acción de Gracias que, a su vez, se celebra el cuarto jueves del mes de noviembre. En el presente año 2020, esto ocurrirá el próximo jueves 22 de noviembre.
Este es un día de rebajas en tiendas y grandes almacenes. Como complemento al Black Friday también existe el Cyber Monday o «CiberLunes» cuya celebración es el primer lunes después del día de Acción de Gracias y que también está destinado a iniciar la campaña navideña con grandes rebajas, pero en esta ocasión para el comercio electrónico.
Fuera del ámbito de los Estados Unidos, el Black Friday nos ha llegado fundamentalmente a través de las tiendas Online aunque ya se puede decir que su implantación en las tiendas tradicionales es un hecho.
Cómo puedo utilizar el Black Friday en mi negocio
Obviamente, todo va a depender del tipo de negocio que tengas, si vendes productos en tienda física puedes aprovechar para colocar alguna oferta especial para ese día y comunicársela a tus clientes vía online a través de tu web, redes sociales, etc.
En el caso de que vendas servicios para los que haga falta un contacto directo con el cliente, como en el caso de los masajes, dietas, tratamientos estéticos, etc. puedes aprovechar para la venta de bonos anticipados aunque el servicio lo vayas a prestar más adelante.
Si vendes productos por internet, la opción es similar a la de las tiendas físicas. Puedes ofertar un producto a un precio realmente competitivo o al precio habitual pero complementándolo con otros «regalos» que lo hagan muy interesante.
Quizás estés preparando una sorpresa para la campaña navideña. Este es el momento de crear expectativas en tu cliente para que no deje de visitarte o de seguirte.
En cualquier caso, tanto el Black Friday como el Cyber Monday son ocasiones perfectas para establecer un contacto con tus clientes, para hacerte oír, aconsejarles, aportarles valor, enviarles una caricia y, en definitiva, recordarles que sigues ahí listo para satisfacer sus necesidades.