Uno de los flancos de seguridad más débiles en cualquier sistema informático es, sin lugar a dudas, la mala gestión que solemos hacer de las contraseñas. Un problema muy común es la útilización de una única contraseña para todo o varias con pequeñas variaciones entre sí.
Otra mala costumbre es la de elegir contraseñas muy fáciles de averiguar con métodos relativamente sencillos: contraseñas como «1234» o «abcd», tu fecha de nacimiento, tu DNI, el nombre de uno de tus hijos o parientes cercanos, el de tu mascota y un largo etc.
Una contraseña robusta no debe coincidir con ninguna palabra del diccionario y, desde luego, no debe obtenerse de ningún aspecto vinculable contigo.
Las contraseñas serán más robustas cuanto más extrañas y aleatorias sean, por ejemplo, una contraseña válida podría ser algo así como: 5T%#kKp\h34z$=)9u3.
Contraseñas como esta tienen el inconveniente de que son difíciles de recordar. Imagina lo complicado que sería tener que recordar 15 o 20 de estas.
Tampoco es buena idea crear un documento en el que anotar todas las contraseñas que manejas. Cualquiera que consiga acceder a dicho documento tendrá a su disposición todos tus secretos. Otra cosa muy diferente es que ese documento se guardara encriptado con un algoritmo robusto.
Esto es precisamente lo que hace KeePass, una aplicación que yo llevo unos años usando y que cada día me tiene más enganchado. En este artículo de SoftZone puedes ampliar información sobre esta pequeña maravilla.
Te aseguro, y tengo pruebas de ello, que una vez que te acostumbras al uso de KeePass, no puedes vivir sin él.
Pequeñas perlas de Telegram
Si eres usuario de Telegram aquí te dejo el enlace a un canal en el que encontrarás música de Jazz y Blues, o este otro si lo que te gusta es la música clásica.
